Pongamos unos ejemplos. La empresa Orinoco Iron fue acusada a inicios de marzo pasado de contaminar una gran parte del extremo derecho del río Orinoco, en el estado de Bolívar, Venezuela. Había vaciado gran cantidad de fluidos que contenían polvo de hierro mezclado con otras sustancias tóxicas en el cauce y con ello ocasionó un cambio de color en las aguas que los especialistas denominan "mancha roja".
A mediados de ese mes el Ministerio del Ambiente anunció una multa de 70 mil bolívares, una investigación del incidente y la paralización de labores si había dolo de la empresa. Hoy el proceso continúa.
Veamos otro caso. El 3 de julio del 2007 la compañía minera Tambillos, que opera en Chile, dejó escurrir material de relave a una quebrada cercana, lo que para la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) de ese país fue un hecho grave "por el riesgo que significó al medio ambiente y porque fue una reincidencia, es decir, fallas operacionales y de gestión ambiental repetidas por la empresa".
En consecuencia le aplicó una multa de 648 unidades tributarias, una suma cercana a los 50 mil dólares. Antes ya la había multado con el doble de ese monto por otro incidente similar.
Y si nos vamos un poco más lejos, en España el Ministerio del Medioambiente planteó y obtuvo en agosto del 2002 una sanción de 45 millones de euros, la mayor de la historia española hasta ese momento, contra la compañía sueco-canadiense Boliden por daños ambientales: vertió 6 millones de metros cúbicos de lodos metálicos y agua ácida en el entorno del parque nacional de Doñana.
El hecho, ocurrido en abril de 1998, es considerado uno de los mayores desastres ambientales en España. Al final la empresa llevó el caso a los tribunales, se declaró en quiebra y cerró sus operaciones.
Los tres casos anteriores nos hablan de la capacidad de acción de los ministerios del ambiente –o de organismos con ese rango, como la CONAMA chilena– para intervenir rápidamente en casos de daño ambiental. En el Perú, el pasado 12 de mayo se creó mediante decreto legislativo el Ministerio del Ambiente, en medio de la Cumbre ALC-UE, pero desde un inicio las críticas le han caído como lluvia ácida.
Para muchos entendidos, el nuevo organismo nació mal desde el momento en que lo crearon sin un debate previo sobre sus atribuciones. Hoy no se sabe sus funciones exactas.
Ana Leyva, secretaria ejecutiva de la Red Muqui, señala que, por ejemplo, en Chile la presidenta Michelle Bachelet ha dado un plazo de un año para la elaboración de un proyecto de ley de creación de un ministerio del Medioambiente que reemplazará a la CONAMA y que vence a fines de junio.
Después se impulsará un debate nacional, incluso con la participación de expertos extranjeros. "En el Perú, el grupo de trabajo, que encabezó el propio Antonio Brack, tuvo un par de meses para plantear un proyecto similar. En ese tiempo no se puede hacer un diagnóstico, una propuesta de política ambiental y un proyecto de ley sobre el Ministerio del Ambiente", cuenta.
A mediados de ese mes el Ministerio del Ambiente anunció una multa de 70 mil bolívares, una investigación del incidente y la paralización de labores si había dolo de la empresa. Hoy el proceso continúa.
Veamos otro caso. El 3 de julio del 2007 la compañía minera Tambillos, que opera en Chile, dejó escurrir material de relave a una quebrada cercana, lo que para la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) de ese país fue un hecho grave "por el riesgo que significó al medio ambiente y porque fue una reincidencia, es decir, fallas operacionales y de gestión ambiental repetidas por la empresa".
En consecuencia le aplicó una multa de 648 unidades tributarias, una suma cercana a los 50 mil dólares. Antes ya la había multado con el doble de ese monto por otro incidente similar.
Y si nos vamos un poco más lejos, en España el Ministerio del Medioambiente planteó y obtuvo en agosto del 2002 una sanción de 45 millones de euros, la mayor de la historia española hasta ese momento, contra la compañía sueco-canadiense Boliden por daños ambientales: vertió 6 millones de metros cúbicos de lodos metálicos y agua ácida en el entorno del parque nacional de Doñana.
El hecho, ocurrido en abril de 1998, es considerado uno de los mayores desastres ambientales en España. Al final la empresa llevó el caso a los tribunales, se declaró en quiebra y cerró sus operaciones.
Los tres casos anteriores nos hablan de la capacidad de acción de los ministerios del ambiente –o de organismos con ese rango, como la CONAMA chilena– para intervenir rápidamente en casos de daño ambiental. En el Perú, el pasado 12 de mayo se creó mediante decreto legislativo el Ministerio del Ambiente, en medio de la Cumbre ALC-UE, pero desde un inicio las críticas le han caído como lluvia ácida.
Para muchos entendidos, el nuevo organismo nació mal desde el momento en que lo crearon sin un debate previo sobre sus atribuciones. Hoy no se sabe sus funciones exactas.
Ana Leyva, secretaria ejecutiva de la Red Muqui, señala que, por ejemplo, en Chile la presidenta Michelle Bachelet ha dado un plazo de un año para la elaboración de un proyecto de ley de creación de un ministerio del Medioambiente que reemplazará a la CONAMA y que vence a fines de junio.
Después se impulsará un debate nacional, incluso con la participación de expertos extranjeros. "En el Perú, el grupo de trabajo, que encabezó el propio Antonio Brack, tuvo un par de meses para plantear un proyecto similar. En ese tiempo no se puede hacer un diagnóstico, una propuesta de política ambiental y un proyecto de ley sobre el Ministerio del Ambiente", cuenta.
¿FISCALIZAR QUÉ?
El día en que el presidente Alan García firmó el decreto de creación del nuevo ministerio, en Palacio de Gobierno, dijo que este tendría que ser "la espuela, el látigo detrás de todos los ministerios". La realidad dice que sus palabras solo son retórica. Para Leyva las principales atribuciones del Ministerio del Ambiente que son las de fiscalización y sanción no están claras y son compartidas con otros ministerios.
"En el decreto se dice que se realizarán ‘acciones de fiscalización’ pero no se precisa cuáles respecto a actividades que tampoco se señalan. Es un ministerio recortado", enfatiza. Es decir, no podría actuar con tanta celeridad como sus homólogos en los casos citados al inicio.
La especialista llama la atención sobre tres puntos:
1) las licencias para los Estudios de Impacto Ambiental seguirán siendo otorgadas por el Ministerio de Energía y Minas
2) las licencias para el uso y distribución del agua en las zonas de cultivo las dará el Ministerio de Agricultura
3) los límites máximos permisibles en emanaciones también serán establecidos por estos sectores.
"En el decreto se dice que se realizarán ‘acciones de fiscalización’ pero no se precisa cuáles respecto a actividades que tampoco se señalan. Es un ministerio recortado", enfatiza. Es decir, no podría actuar con tanta celeridad como sus homólogos en los casos citados al inicio.
La especialista llama la atención sobre tres puntos:
1) las licencias para los Estudios de Impacto Ambiental seguirán siendo otorgadas por el Ministerio de Energía y Minas
2) las licencias para el uso y distribución del agua en las zonas de cultivo las dará el Ministerio de Agricultura
3) los límites máximos permisibles en emanaciones también serán establecidos por estos sectores.
En el caso de la fiscalización y sanciones a la minería actualmente se encarga Osinergmin. "El Ministerio del Ambiente no verá estos temas. Y si revisamos la legislación ambiental en la región, los ministerios ambientales de México, Brasil, Argentina, Colombia o Costa Rica, sí tienen estas atribuciones", indica Leyva.
Pero hay más. En el tema de la tala ilegal, el Ministerio del Ambiente no puede hacer nada por el momento. Brack explicó esta semana que la norma de creación menciona que el organismo que dirige se encargará del "manejo estratégico de los recursos naturales" y ahí "se puede hacer algo". Ojalá, pero habrá que normarlo.
Otro problema es la duplicidad de funciones con otros ministerios. Por ejemplo, esta cartera cuenta con un Tribunal de Controversias Ambientales, que debería ser la última instancia en el tema. Pero actualmente no lo es y cualquier empresa con un fallo en contra puede acudir a otra autoridad administrativa y obtener otro fallo a favor.
Gloria Ramos, presidenta de la Comisión de Ambiente y Ecología del Congreso, señala que de todos los vacíos que tiene la creación del ministerio, lo más trascendental y urgente es que a Brack se le transfiera la potestad de aprobar los estudios de impacto ambiental. "El Ministerio del Ambiente debe cumplir una labor preventiva en relación con el cumplimiento de las normas ambientales".
Muchos expertos coinciden en que el Ministerio de Energía y Minas ya no debe encargarse de esto porque también se encarga de propiciar los proyectos de desarrollo minero. ¿Cómo sancionar a quiénes apuestan por la inversión? El MEM es juez y parte.
Un asunto final: la policía ecológica debería estar adscrita al Ministerio del Ambiente y la norma de creación no lo estipula. El ministro Brack señala que para poder cumplir un rol de control y cumplimiento de las normas debería haber unos 3 mil de estos policías especializados. Actualmente hay 300 para todo el territorio nacional.
"En general todo el decreto de creación del Ministerio del Ambiente es muy general y todavía tienen que establecerse los alcances y las atribuciones con nuevas normas", precisa Ana Leyva, de la Red Muqui. Se trata, por ahora, de un ministerio incompleto, en construcción. Hace unos días la periodista Rosa María Palacios le dijo a Brack en su programa, refiriéndose a los límites de sus atribuciones: "Ministro, con esto araña, pero no muerde".
Pero hay más. En el tema de la tala ilegal, el Ministerio del Ambiente no puede hacer nada por el momento. Brack explicó esta semana que la norma de creación menciona que el organismo que dirige se encargará del "manejo estratégico de los recursos naturales" y ahí "se puede hacer algo". Ojalá, pero habrá que normarlo.
Otro problema es la duplicidad de funciones con otros ministerios. Por ejemplo, esta cartera cuenta con un Tribunal de Controversias Ambientales, que debería ser la última instancia en el tema. Pero actualmente no lo es y cualquier empresa con un fallo en contra puede acudir a otra autoridad administrativa y obtener otro fallo a favor.
Gloria Ramos, presidenta de la Comisión de Ambiente y Ecología del Congreso, señala que de todos los vacíos que tiene la creación del ministerio, lo más trascendental y urgente es que a Brack se le transfiera la potestad de aprobar los estudios de impacto ambiental. "El Ministerio del Ambiente debe cumplir una labor preventiva en relación con el cumplimiento de las normas ambientales".
Muchos expertos coinciden en que el Ministerio de Energía y Minas ya no debe encargarse de esto porque también se encarga de propiciar los proyectos de desarrollo minero. ¿Cómo sancionar a quiénes apuestan por la inversión? El MEM es juez y parte.
Un asunto final: la policía ecológica debería estar adscrita al Ministerio del Ambiente y la norma de creación no lo estipula. El ministro Brack señala que para poder cumplir un rol de control y cumplimiento de las normas debería haber unos 3 mil de estos policías especializados. Actualmente hay 300 para todo el territorio nacional.
"En general todo el decreto de creación del Ministerio del Ambiente es muy general y todavía tienen que establecerse los alcances y las atribuciones con nuevas normas", precisa Ana Leyva, de la Red Muqui. Se trata, por ahora, de un ministerio incompleto, en construcción. Hace unos días la periodista Rosa María Palacios le dijo a Brack en su programa, refiriéndose a los límites de sus atribuciones: "Ministro, con esto araña, pero no muerde".
La República, (Domingo) 25/05/2008
1 comentario:
Buenos días:
Definitivamente la creación del medio ambiente ha sido trascendental para afrontar los graves problemas de contamonacion ambiental coyuntural. Se debe actuar con objetivos y metas trazadas a corto y largo plazo, en todoas las areas de desarrollo poblacional, en todos los niveles, empezando desde los centros de educacion, donde se encuentran los futuros ciudadanos que coexistiran directamente con la naturaleza y tomaran decisiones buenas o malas de acuerdo a lo que hayan aprendido.
Pienso que en primer término, el personal que labore en el nuevo ministerio debe convocarse por concurso público de méritos y por la web, deben darse los requisitos, así como los resultados y criterios de evaluación. PÚBLICAMENTE Y TRANSPARENTEMENTE; porque, esto SÍ se debe tomar en serio, se trata de nuestro planeta, NUESTRO UNICO HOGAR DENTRO DEL VASTO UNIVERSO,Por Dios, reaccionemos y hagamos las cosas en serio, ya no más favoritismos políticos. La gente que SIRVA en este ministerio debe ser la más capaz e idónea si queremos que realmente cambie la situación caótica de contaminación actual en nuestro Perú. Voy a estar al tanto de ello y, me comprometo a colaborar en todo lo que esté al alcance de mis manos como ciudadana común y silvestre.
Gracias por este espacio...
Estaremos en contacto
Sra. R. Lila
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