El anuncio del presidente Alan García de crear el Ministerio del Medio Ambiente resulta una sana y necesaria decisión, si realmente existe el interés de abordar el tema del medio ambiente como política de Estado. La preocupación mundial acerca del peligro sobre el medio ambiente tuvo su clarinada de alerta en 1972, cuando las Naciones Unidas crean el Programa de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente (PNUMA), cuya misión es “dirigir y alentar la participación en el cuidado del medio ambiente, inspirando, formando y dando a las naciones y a los pueblos los medios para mejorar la calidad de vida, sin poner en peligro la de las futuras generaciones”.En 1992, las Naciones Unidas celebran la “Cumbre de la Tierra” en donde se adopta el “Programa 21”, que es un plan de acción que explica las medidas para lograr un desarrollo sostenible. En esa fecha, más de 1,800 ciudades del mundo elaboraron su propio Programa 21 Local. En este encuentro se acordó la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, que posteriormente llevaría al “Protocolo de Kyoto sobre el cambio climático”, que es un acuerdo jurídico vinculante, donde los países desarrollados se comprometen a reducir sus emisiones colectivas de gases que causan el denominado efecto invernadero, en un porcentaje del 5.2% entre el 2008 y 2012, tomando como referencia los niveles de 1990.A fin de sensibilizar a la opinión pública mundial acerca del peligro de la contaminación y el daño al ecosistema, las Naciones Unidas han institucionalizado el día 5 de junio de cada año como el “Día Mundial del Medio Ambiente”, que debe convocarnos a ser vigilantes del cumplimiento de los acuerdos y compromisos que han asumido los gobiernos del mundo, principalmente de los países desarrollados que son los mayores contaminantes por su elevado consumo de energía fósil, para que reduzcan la emisión de los gases que causan daño al medio ambiente.La implementación del Ministerio del Medio Ambiente en el Perú debe seguir la recomendación internacional de los organismos dedicados al estudio y evaluación del medio ambiente, como son las Naciones Unidas. Así resultará necesario y positivo contar con un instrumento de gestión al más alto nivel, para que el Ejecutivo se encargue de aplicar y monitorear la política del medio ambiente, que deberá superar el burocratismo de las actuales dependencias del Estado, que a pesar de contar con una frondosa legislación como son los cerca de 5,000 normas ambientales, esta no se aplica con rigor y no se exige, principalmente a las empresas mineras e industriales, el estricto cumplimiento de las normas, destacando la alta contaminación en la zona de La Oroya, la contaminación de los ríos en la selva, el vertedero de las aguas residuales en el mar, la polución en las ciudades, la carencia de servicios de agua y desagüe en un alto porcentaje de la población, etc.Esperamos que esta nueva institución se oriente con una adecuada dirección técnica que solamente la pueden ofrecer los especialistas, a trabajar con seriedad un tema muy sensible como es el cuidado del medio ambiente, que afecta principalmente a los más pobres de las zonas urbanas y rurales.
Expreso, 02/01/2008
1 comentario:
Oiga Ud, incluso se dice que los metales pesados tendrian relacion con la conducta agresiva y la criminalidad. Una buena idea lo del Ministerio, encontramos una aguja en un pajar
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