miércoles, 16 de enero de 2008

"Mineras contaminan porque nadie controla"


Antonio Brack dirige el equipo que diseña el Ministerio de Medio Ambiente, pero no aspira a ponerse el fajín de ministro ni claudica en sus ideas.
¿Qué se debe esperar del Ministerio de Medio Ambiente?

Para el Perú, en el siglo XXI, un Ministerio del Ambiente es una inversión. Están hablando por ahí que es muy caro, pero hay informes muy contundentes, hechos por el Banco Mundial, que indican que la mala gestión ambiental le cuesta al país un promedio de ocho mil 200 millones de soles por año.

¿En qué?

Calidad de agua, saneamiento, aire contaminado, que genera muerte por enfermedades pulmonares, residuos sólidos, aguas residuales sin tratamiento alguno, tala de bosques...

¿Cuál sería su estructura?

Absorbería el Consejo Nacional del Ambiente, una gran parte del Inrena, la Dirección de Salud Ambiental, del Minsa, el Instituto de Investigación de la Amazonía, el Instituto del Mar, etc.

¿Qué falta?

Resolver, en los próximos días, qué niveles de fiscalización asumiría. Esencialmente, definir la línea entre el Ministerio de Energía y Minas y el Ministerio de Ambiente. Ahí se tiene que trabajar bien para no dejar vacíos legales.

Todo eso suena bonito, pero ¿hay voluntad política para fiscalizar?

Al menos, lo que les he escuchado al presidente, al ministro de Economía, al ministro Rey Rey, sobre industria pesquera limpia, indica que hay la decisión política de avanzar en esto. He leído que en Chimbote, en la bahía El Ferrol, los industriales pesqueros van a invertir 18 millones de dólares para hacer un emisor y no seguir contaminando.
¿Habrá control y sanción?

Muchos sueñan con un Ministerio eminentemente punitivo, castigador. Aquí se tienen que introducir procesos de mejora continua, porque la legislación ambiental prácticamente empieza en los años 90. Tenemos recién 18 años de legislación ambiental.
¿Cómo encarar a esas ONG antimineras, antiinversión?

En el país habrá más de cuatro mil ONG. Hay grupos que se oponen a cualquier iniciativa minera, pero esto nace porque el Estado ha fallado muchísimo y la gente tiene desconfianza.
Ud. pudo cambiar esto en el Conam. ¿En el ministerio será otra cosa?

Eso no lo puedo decidir yo. No soy ministro ni nada. Yo solo tengo el encargo de un equipo técnico que tiene que discutir esto y hacer una propuesta técnica viable. Yo prefiero no soñar sobre esto. No está en mis manos.

¿Usted será el padre de la criatura, pero no le enseñará a caminar?

No tengo la más mínima ambición ni idea. Durante mi vida profesional , que es larga -más de 45 años-, recibí muchas ofertas y, felizmente, me mantuve al margen del poder político.
¿Eso significa que le dirá "No" al presidente Alan García?

No he analizado eso porque no vivo de sueños sino de realidades. Si un día me hicieran alguna propuesta, la analizaré y tomaré una decisión, pero no vivo pensando en si me saco la Tinka o no.

¿Cómo se fiscalizará a las mineras?

Haciéndoles seguimiento a los estudios de impacto y a los programas de adecuación medioambiental. Si hay alguna que contamina es porque el Estado no está controlando. Hay que ser mucho más enérgico con esas empresas.
¿Su discurso ha cambiado?

Yo no he variado mi línea. Siempre he planteado que soy un fundamentalista ecológico. Los recursos naturales, como la minería, están para ser aprovechados, pero con una minería limpia y con responsabilidad social.

¿No sufre presión o influencias?

Tengo la satisfacción de no ser de ningún partido político y de no estar amarrado a esquemas políticos. Yo soy técnico. Acabo esta propuesta técnica y ahí termina mi función. Ahora, para estar 'in' y de moda, hay que estar contra la minería o contra el TLC, pero yo no me rijo por modas.

¿Quizá lo hace ver diferente su cercanía con las mineras?

Yo tengo una empresa consultora. Si alguien me pide una evaluación para mejorar sus estándares, llevo un equipo y lo asesoro. ¿Por qué no lo voy a hacer? Yo no veo ahí ninguna cuestión como para rasgarse las vestiduras.


Perú.21, 16/01/2008

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